Islandia será protagonista de la retrospectiva que la Semana Internacional de Cine de Valladolid realizará en su 62ª edición, del 21 al 28 de octubre, en colaboración con Icelandic Film Centre.
No cabe duda de que el cine islandés goza de un espléndido momento. A pesar de que no cuenta con una amplia producción cinematográfica, el éxito de algunas de sus producciones ha logrado situar a este pequeño país de poco más de 320.000 habitantes en el panorama cinematográfico internacional.
Sirva como ejemplo nuestro propio certamen que, en sus últimas ediciones, ha incluido varios títulos islandeses en su programación. Es el caso de Volcano, de Rúnar Rúnarsson, que logró el Premio de la sección Punto de Encuentro en 2011; Revolution Reykjavik, de Isold Uggadóttir, Espiga de Oro al Mejor cortometraje en 2012; Life in a Fishbowl, de Baldvin Z, incluido en la sección Punto de Encuentro en 2014, y un año más tarde, en la 60ª edición, dos nuevos títulos de la Sección Oficial eran premiados: Rams, de Grímur Hákonarson, con el máximo galardón, la Espiga de Oro, y Fúsi (Virgin Mountain), de Dagur Kári, con el premio al Mejor Actor para Gunnar Jónsson.
Puede decirse que la cinematografía de Islandia se abrió al exterior en los años 80, pero fue en realidad en la década posterior cuando el fenómeno cultural islandés se dio a conocer internacionalmente gracias a figuras musicales como Björk o el grupo Sigur Rós. En el ámbito cinematográfico, Fridik Thor Fridriksson logra que su película Hijos de la naturaleza sea nominada por primera vez a los Óscar a la Mejor película de habla no inglesa, en 1991.
El año 2003 marca el comienzo de un periodo muy significativo con la creación del Icelandic Film Centre, cuya nueva legislación permitirá un mayor apoyo a través de fondos y estrategias para el despegue de la filmografía del país. Tampoco se puede olvidar la magnífica promoción que se ha hecho del territorio islandés como escenario cinematográfico, con sus parajes inhóspitos, en el que ya se han rodado unas cuantas superproducciones para cine y televisión.
La mayor parte de sus realizadores no superan los 50 años y, por citar algunos de ellos, junto a los ya mencionados figuran Baltasar Kormátur, uno de los más veteranos; Ragnar Bragason o la directora Valdís Hákonarson, entre otros.
La retrospectiva programará una selección, en torno a una veintena de largometrajes y cortometrajes, que permitirá conocer un tipo de cine singular en el que destacan sus espectaculares paisajes, con una narrativa que utiliza en muchas ocasiones silencios esclarecedores y con un peculiar sentido del humor que ahonda en las relaciones humanas en el entorno rural y urbano del país nórdico.
