Desde el pitido inicial, el derbi entre el VRAC Quesos Entrepinares y el Recoletas Burgos en los Campos de Bienvenido Nieto se mostró intensamente disputado, con un juego físico que elevaba la tensión. El VRAC dominaba en los puntos de encuentro y presionaba constantemente, lo que llevó a los burgaleses a cometer indisciplinas. Balta Taibo abrió el marcador con una patada precisa, poniendo el 0-3 en el primer minuto. Once minutos después, amplió la ventaja a 0-6 con otra patada, mientras los vallisoletanos mantenían el control.
A pesar de esto, Burgos comenzó a encontrar su ritmo y logró acercarse en el marcador gracias a una patada de Guillermo Mateu, ajustando el tanteo a 3-6. La defensa del VRAC se mantuvo firme, con acciones clave como un gran placaje de Pablo Miejimolle. Sin embargo, varios errores en la recepción impidieron a los vallisoletanos aumentar su ventaja. Tras varias fases de juego, Álvaro Pírez rompió la defensa burgalesa y conectó con Perotti, quien consiguió un ensayo que puso el 3-11 en el marcador.
Pero Burgos no se rindió. Justo antes del descanso, Facundo López logró el primer ensayo para los locales, dejando el marcador 8-11 a favor del VRAC al finalizar la primera mitad.
La segunda parte comenzó con los burgaleses tomando el control. Pablo Rascón y Tani Bay consiguieron ensayos que, junto con una transformación de Iñaki Mateu, colocaron el 20-11 en el marcador. La indisciplina se convirtió en un problema para el VRAC, que perdió a Marc Sánchez por tarjeta amarilla, y permitió a Burgos aumentar su ventaja a 23-11.
Pero el VRAC no se rindió. Con el tiempo en contra, Balta Taibo lideró una remontada épica. Miejimolle rompió la defensa y marcó un ensayo, seguido de una transformación de Taibo, acercando el marcador a 23-18. A solo tres minutos del final, Mauro Perotti encontró un hueco y consiguió el ensayo decisivo. Taibo lo transformó, dejando el marcador final en un emocionante 23-25.
El Recoletas Burgos intentó responder, pero el VRAC defendió con fiereza y se llevó una victoria memorable en un partido que será recordado por su intensidad y el sacrificio demostrado en los últimos minutos.